27 de gener del 2015

Star Wars. Planetas: Alderaan, Bespin y Coruscant. Por Francesc Marí

Durante milenios, Alderaan fue la perla más bella del universo, el centro cultural de la galaxia y su “alma”. Sus ciudadanos conservaron el planeta para que pudiera seguir igual que en su estado primigenio. Los pobladores humanos de Alderaan, que llegaron a dicho planeta hacía más de veinticinco mil años, siempre fueron un pueblo pacífico volcado en el cultivo de la mente y la ciencia a través de la universidad de Aldera. 
La superficie del planeta está cubierta por praderas, grandes bosques y junglas, montañas, pantanos y pequeños mares. Entre las diversas especies que pueblan el planeta se encuentran los nerf, unos mamíferos herbívoros con astas, y los thranta, unas criaturas voladoras que los alderaanianos han domesticado para utilizarlos como transporte.

Podríamos llegar a decir que este planeta era el más idílico de la galaxia, hasta que el Gran Moff Tarkin utilizó Alderaan para presionar a la princesa Leia para que confesase la localización de la base rebelde, al mentirle, no dudó en utilizar todo el poder de la flamante Estrella de la Muerte y destruir el planeta adoptivo de la princesa con todos sus habitantes, poniendo fin a una larga historia de paz y sabiduría.
Como curiosidad, debéis saber que Alderaan es el único planeta que, además de pertenecer al universo Star Wars, también está presente en el universo Star Trek, siendo mencionado en Star Trek. La nueva generación.

Bespin es un planeta gaseoso y principal fuente del gas tibanna, que es extraída en las instalaciones de la Ciudad Nube o Tibannopolis. Poco se conoce de la flora y la fauna de este planeta, su composición hace que sea difícilmente habitable en su superficie, por lo que las criaturas que se conocen son aves, murciélagos y otros animales voladores, como peces o rawwks, además de algas microscópicas que habitan en las espesas nubes que cubren el planeta.
Este medio adverso no ha sido un impedimento para que formas de vida humanoides, como los propios humanos o ugnaughts, se instalen en ciudades flotantes dedicadas exclusivamente a la extracción, tratamiento y comercialización del valioso gas tibanna. De entre ellas destaca la que, durante un tiempo, fue administrada por Lando Calrissian, la Ciudad Nube. Suspendida en el cielo, sobre el núcleo de la masa gaseosa de Bespin, fue antaño sede de unos grandes líderes reales. Ese glorioso pasado ha llenado el horizonte de sus construcciones de una majestuosidad monumental y una belleza etérea. La ciudad se sostiene sobre una única columna gigante que nace en un reactor-procesador. En su conducto central hueco existen unas paletas de dirección gigantescas que controlan la situación de la base en el espacio. En la Ciudad Nube se ven ciudadanos trabajadores y avanzada tecnología. Por todas partes hay instalaciones que procesan para la exportación del gas antigravitacional tibanna, poco común, que se da en la atmósfera de Bespin.

Coruscant es la sede del gobierno galáctico -sea durante la República como durante el Imperio-, se trata de un mundo cubierto por una sola ciudad que, en la práctica, es el centro del universo conocido. Antes de que Lord Sidious se hiciera con el poder, los representantes, de los mundos miembros de la República se congregaban en este planeta para participar en esa empresa colosal que es el gobierno galáctico. La capital galáctica está cubierta en su práctica totalidad por rascacielos, en su mayoría, de kilómetros de altura en los que viven más de un billón de habitantes. El planeta es un gran centro burócrata, por lo que depende totalmente del apoyo externo para subsistir del que recibe una corriente continua de inmensos cargueros de avituallamiento. Cientos de pisos por debajo de los pináculos de los rascacielos, los suelos de cañones urbanos de Coruscant nunca ven la luz solar. Los niveles inferiores de la mayor ciudad de la galaxia, un mundo de iluminación artificial, son las únicas zonas que pueden permitirse muchos de los habitantes del planeta. Por sus calles, donde retumban las máquinas que sirven a la élite de los niveles superiores, rondan desvalijadores y maleantes, y las paredes están cubiertas de extrañas criaturas.
Antes de la masiva urbanización, Coruscant era un planeta rocoso con mares y montañas nevadas, pero rápida la superpoblación consumió los recursos naturales y actualmente solo se puede ver una gran masa de agua artificial conocida como el Mar Occidental, principal destino turístico del planeta, y los dos picos gemelos de las montañas Manarai, que hoy en día están rodeadas de restaurantes flotantes.

Star Wars. Manual de Supervivencia es un proyecto de LASDAOALPLAY? y El Cine de Hollywood