5 de setembre del 2011

Viejos relatos de corsarios en las Azores


Las islas Azores fueron descubiertas entre 1317 y 1339 por navegantes portugueses y genoveses, a las órdenes del rey de Portugal. Pero no fue hasta el siglo siguiente cuando empezó la verdadera colonización de unas islas que, a diferencia de las Canarias, estaban completamente deshabitadas. Las islas más orientales, Santa Maria y Sao Miguel, fueron las primeras en ser colonizadas. La tercera fue llamada isla de Jesucristo hasta que una importante comunidad de colonos judíos consiguió presionar para que dicho nombre fuera cambiado. Así fue como se llamó simplemente Terceira. Y esta isla es el objeto principal del artículo.

Pero primero hablemos un poco más de historia. Las Azores, por su singular y estratégico enclave en el medio del Atlántico, fueron una zona de continuo tráfico naval comercial una vez que se descubrió el Nuevo Mundo. Era un sitio ideal para aprovisionar las nave

s en el camino hacia el nuevo continente y cuando los barcos volvían a Europa, cargados de riquezas expoliadas, siempre solían hacer parada en alguna de las islas para hacer más llevadera la durísima travesía. El propio Cristóbal Colón abrió esa costumbre cuando hizo escala en el archipiélago al regreso de su primer viaje.

Además, entre 1580 y 1640, el reino de Portugal estaba también bajo el yugo español. Felipe II había ascendido a su trono tras la muerte sin descendencia del rey Dom Sebastiao. Las Azores pasaron a convertirse en centro de escala oficial de los navíos españoles.

Pero naturalmente, este enorme tráfico naval ejerció un efecto llamada para corsarios y piratas. Las Azores atesoran uno de los más ricos expolios de barcos antiguos hundidos. Los asaltantes utilizaban zonas despobladas de las islas como base de operaciones para atacar a los galeones españoles que transportaban el oro y la plata americana hacia Cádiz. Los piratas argelinos abrieron el fuego de estas operaciones asolando el litoral. A finales del siglo XVI se sumaron buques pertenecientes a las potencias enemigas del imperio español. Ingleses, holandeses, y franceses hundieron todos los barcos que pudieron y tomaron toda la carga posible.



Un nombre destaca por encima de los demás. Se trata del mismísimo Francis Drake (1540-1596), un héroe para la corona inglesa (Isabel I le nombró Sir en 1581) y el enemigo público número 1 para la flota del Felipe II. Drake asoló las costas y los puertos buscando los tesoros del nuevo mundo y sus huestes fueron las responsables del hundimiento de una inmensa cantidad de navíos.

Felipe II y sus sucesores ordenaron la construcción de fortalezas en el litoral siendo la más destacada la de Angra do Heroismo, situada en la península de Monte Brasil, en la isla Terceira.

Más de cincuenta fuertes fueron construidos en Terceira para defenderse de los virulentos ataques corsarios y las luchas fueron cruentas. En el litoral de la isla se han localizado los restos de más de 800 navíos hundidos. Además, por si esto no era suficiente, también había combates entre las tropas españolas y los resistentes portugueses. Las costas fueron el escenario de una serie de batallas que se libraron hasta el fin del dominio español sobre el reino de Portugal.

Así pues, Terceira fue la que vivió los más enconados conflictos y hasta allí arribaron gentes que procedían de prisiones. Al igual que Australia para la corona británica, fueron los más indeseables de la sociedad los que mejor podían adaptarse a las duras condiciones de vida y aislamiento de ciertas islas.

Terceira, situada a casi 3000 kilómetros de distancia de la costa lisboeta, conserva gran parte de esta herencia natural y cultural que caracterizó a la historia de este archipiélago durante más de dos siglos. En las siguientes fotos podeis ver Monte Brasil y los restos de la antigua ciudadela de Angra do Heroismo. Y también he seleccionado algunas de las escarpadas costas de la isla, testigo mudo de viejas historias de corsarios y piratas. Unas historias que no han aparecido debidamente en el cine. Sigue pendiente una película importante sobre la controvertida figura de Francis Drake.