23 de març del 2010

Star Wars in Concert. Madrid, 20 de marzo 2010


De vez en cuando se presenta la oportunidad de asistir a un evento único y magnífico. Son ocasiones en las que hay que movilizarse y hacer un esfuerzo para poder asistir a un acontecimiento de aquellos que vas a recordar de por vida. Este es el caso del Star Wars in Concert, un espectáculo de primer nivel que supone un recorrido por la historia de Star Wars a través de su magnífica música.

La Royal Philharmonic Concert Orchestra, bajo la dirección del belga Dirk Brossé, interpreta durante casi dos horas las piezas fundamentales de las míticas bandas sonoras compuestas por el gran John Williams. La perfección de su interpretación, y la brillantez técnica presente en su sonoridad te transportan directamente al mundo de Star Wars pero, además, una enorme pantalla situada detrás de la orquesta recrea los diferentes momentos clave en la saga con una coordinación digna de elogio con respecto a la música. Los efectos de luz y de puesta en escena acaban de darle al espectáculo una dimensión casi mágica que permite al espectador tener una experiencia completa de inmersión en el fantástico mundo de la saga de ciencia ficción más importante de la historia.

Uno de los pocos actores que ha tenido el honor de estar presente en las seis películas dando vida a C-3PO, Anthony Daniels, es el encargado de hacer una introducción previa a cada pieza rememorando los diferentes momentos por los que pasa el argumento de los films y recuperando la narración de los hechos de una manera nueva e innovadora. Resulta difícil pensar en un mejor maestro de ceremonias. Quizá Ian McDiarmid (quien dio vida al Emperador Palpatine) pero su estado de salud ha hecho imposible que pudiera estar disponible para una gira tan exigente que empezó hace unos días y se alargará hasta julio recorriendo gran parte del continente europeo y las principales ciudades estadounidenses.

De esta manera, asistimos a un recorrido cronológico por los hechos más destacados de la saga Star Wars. Desde las primeras aventuras de un niño esclavo en el desértico planeta Tatooine llamado Anakin Skywalker, hasta la victoria final de la Alianza Rebelde sobre el Imperio en la batalla de Endor.

El inicio es tremendamente emotivo con las notas de la fanfarria de la 20th Century Fox seguido del tema principal de Star Wars. Después llegan momentos sentimentales e intimistas con Anakin's Theme y Across the Stars (que ilustra el amor prohibido entre Anakin y Padmé), intercalados con piezas más divertidas como The Robot Auction (perteneciente a la trilogía original pero ubicada en la primera parte del concierto). Pero los momentos épicos no tardan en llegar con tres magníficas composiciones: The Flag Parade, Duel of the Fates (brillante actuación del coro), y Battle of the Heroes.




La segunda parte del concierto cubre los principales temas musicales de la trilogía original con piezas míticas que ofrecen los mejores momentos del concierto. Las composiciones se van sucediendo, a cual mejor, consiguiendo la respuesta apasionada del público. Es entonces cuando suenan temas como The Imperial March, Cantina Band, Princess Leia's Theme, The Asteroid Field, Yoda's Theme, Luke and Leia, Parade of The Ewoks, Funeral Pyre for a Jedi, y un The Throne Room / End Title, que sirve como conclusión al espectáculo incorporando también imágenes de las grabaciones originales de John Williams y su trabajo con George Lucas a lo largo de seis películas que cubren un periodo de casi treinta años.






La estruendosa ovación del público tras un concierto tan fastuoso debía generar un "bonus track" final que no podía ser otro que repetir un tema emblemático donde los haya. El Imperial March o Darth Vader's Theme vuelve a sonar espectacularmente y en esta ocasión la pantalla recoge las imágenes en directo de la orquesta en un reconocimiento lógico al trabajo de unos músicos que, con su magna intepretación, son la pieza fundamental de un espectáculo vibrante y extraordinario.

En definitiva, un gran concierto y un homenaje al trabajo extraordinario que realizó John Williams al crear una banda sonora inmortal. La magia de Star Wars en estado puro.