9 de maig del 2009

Frases de cine. Terminator 3, La Rebelión de las Máquinas (Jonathan Mostow, 2003)

Guión de John D. Brancato y Michael Ferris.



John Connor: El futuro no está escrito. No hay más destino que el que hacemos nosotros mismos. Ojalá pudiera creerlo. Me llamo John Connor, intentaron asesinarme antes de nacer, cuando tenía 13 años lo intentaron de nuevo... máquinas del futuro... Terminators. Mi madre siempre decía que la tormenta se acercaba... el Juicio Final. El comienzo de una guerra entre el hombre y las máquinas. Tres mil millones de vidas se desvanecerían en un instante y yo debería liderar lo que quedara de la raza humana hacia la victoria definitiva.
Eso no ha ocurrido, no ha caído ninguna bomba, los ordenadores no se han hecho con el control, hemos evitado el día del Juicio Final. Debería sentirme a salvo... pero no es así. Vivo al margen de todo, sin teléfono, sin dirección, nada ni nadie puede encontrarme. He borrado todas mis conexiones con el pasado. Pero, por más que lo intento, no puedo borrar mis sueños, mis pesadillas...
Siento el peso del futuro cayendo sobre mí, un futuro que no deseo, de modo que no dejo de huir tan rápido como puedo. A cualquier parte, a ninguna parte...



Terminator: John Connor. Llegó el momento.
John Connor: ¿ has venido a matarme ?
Terminator: No. Debes vivir.



John Connor: Eh, ¿ no te acuerdas de mí ?, ¿Sarah Connor?, ¿la explosión del Cyberdyne?
¿sayonara, baby?... ¿ te suena de algo ?
Terminator: Aquel era otro T-101.
John Connor: ¿ Qué, salís de una cadena de montaje, tal vez ?
Terminator: Exacto.
John Connor: Vaya... voy a tener que volver a enseñartelo todo.



Terminator: Katherine Brewster, ¿ has sufrido alguna herida ?
Kate Brewster: Jódete, gilipollas !
Terminator: No puedo acatar esa orden.



John Connor: Déjala que baje en la próxima salida.
Terminator: Negativo. Katherine Brewster debe ser protegida.
John Connor: Creía que era a mí a quien buscaban.
Terminator: Como no te localizaban, mandaron desde el futuro un T-X para eliminar a tus lugartenientes.
John Connor: ¿ Ella va a estar en la resistencia ?... no, no, tú ni siquiera deberías existir, es decir, hace más de 10 años que destruimos Cyberdyne !!! Evitamos el día del Juicio Final !!
Terminator: Sólo lo aplazasteis, el Juicio Final es inevitable.



John Connor: Dile quien soy !
Terminator: John Connor es el líder de la resistencia mundial y la última esperanza de la humanidad.



Terminator: A Sarah Connor la incineraron en Mexico. Sus amigos esparcieron sus cenizas en el mar y guardaron estas armas según su voluntad.
Kate Brewster: ¿ Qué le pasó ?
John Connor: Leucemia.
Kate Brewster: Lo siento.
John Connor: Cuando se la diagnosticaron vivíamos en California. Sólo le dieron seis meses pero luchó y logró vivir tres años... para asegurarse...
Kate Brewster: ¿ asegurarse ?
John Connor: ...de que el mundo no se acabara. Todo día que pasa es un regalo, me decía. Lo conseguimos, somos libres, pero yo nunca me lo creí del todo. Y supongo que ella tampoco... ¿ sabes que tú fuiste lo más parecido al padre que nunca tuve ? No es para echarse a llorar...



Terminator: Debemos recuperar a Katherine Brewster.
John Connor: ¿ Por qué ? ¿ Por qué es tan importante ?
Terminator: Ella te pondrá en contacto con el ejército y aprendereis a luchar contra Skynet formando el núcleo de la resistencia. Vuestros hijos llegaran a ser importantes.
John Connor: Espera. ¿ Qué ?
Terminator: Es tu esposa.



John Connor: ¿Estás seguro de eso ?, de lo nuestro quiero decir.

Terminator: Tu confusión no es racional. Es una hembra sana en edad de procrear.

John Connor: La cosa es un poco más compleja.

Terminator: Mi base de datos no abarca los detalles del emparejamiento humano.




Terminator: No puedes autoexterminarte.

John Connor: No, tú no puedes. Yo puedo hacer lo que me dé la gana. Soy un ser humano, no soy un maldito robot.

Terminator: Organismo cibernético.

John Connor: Lo que sea ! O vamos a ver a su padre y logramos que desconecte Skynet y evite que ocurra esta mierda o despídete del gran John Connor. Porque tu futuro, mi destino, no lo quiero ni que me lo regalen. Nunca lo he querido.

Terminator: Viendo la dilatación de tus pupilas, la temperatura de tu piel y tus funciones motrices, calculo un 83% de probabilidades de que no aprietes el gatillo.




Kate Brewster: Si nos matan, ¿ eso significa algo para tí ?
Terminator: Si murierais, yo resultaría inútil, y no tendría ninguna razón de existir.



Terminator: Fue Katherine Brewster quien hizo que me reactivaran y me enviaran a través del campo espacio-tiempo.
Kate Brewster: ¿ Exactamente qué papel juego yo en este futuro tuyo ?
Terminator: Eres la esposa de John Connor y la segunda al mando.
Kate Brewster: No...
John Connor: ¿ Qué ?
Kate Brewster: Eres un colgado...
John Connor: Ya, tú tampoco eres precisamente mi tipo. ¿ Y por qué no te envié yo ?
Terminator: No estoy autorizado a responder a tu pregunta.
Kate Brewster: ¿ Por qué no fue él quien te envió ?
Terminator: Había muerto.
John Connor: Oh, vaya rollo.
Terminator: Los humanos mueren, inevitablemente.
John Connor: Sí, lo sé. ¿ y cómo...? ... mejor no quiero saberlo.
Kate Brewster: Dime, ¿ cómo muere ?
Terminator: John Connor fue exterminado el 4 de julio de 2032. Yo fui elegido por el apego emocional que él le tenía a mi número de modelo, debido a su experiencia de la niñez. Eso ayudó en mi infiltración.
John Connor: ¿ Qué ? ¿ Qué estás diciendo ?
Terminator: Que yo te maté.




Terminator: Vuestra frivolidad es buena, alivia la tensión y el miedo a la muerte.



Robert Brewster: Lo siento Katie. He abierto la caja de Pandora...



John Connor: Gracias.
Terminator: Nos volveremos a ver.




John Connor: Para cuando Skynet fue consciente de su capacidad, se había esparcido por millones de servidores informáticos por todo el planeta. Ordenadores corrientes en edificios de oficinas, en cibercafés, en todas partes... todo era software y ciberespacio. No había núcleo del sistema. No se podía desconectar. El ataque empezó a las 18:18, tal como él había dicho. El día del juicio, el día que la raza humana quedó practicamente destruida por las armas que había fabricado para protegerse. Debí darme cuenta que nuestro destino nunca fue evitar el día del juicio sino sobrevivir a él, juntos. El Terminator lo sabía, intentó decirnoslo, pero yo no quise escucharle. Puede que el futuro ya esté escrito, no lo sé. Solo sé lo que el Terminator me enseñó, "nunca dejes de luchar" y nunca lo haré. La batalla no ha hecho más que empezar...