31 de març del 2020

Muerte de un mafioso en Beverly Hills: el caso Stompanato


En 1958, Lana Turner era una de las actrices más famosas de Hollywood. Mantenía su consideración de estrella pero era evidente que estaba empezando a vivir su declive artístico. Johnny Stompanato era un rufián, un matón de medio pelo, que estaba a las órdenes del legendario Mickey Cohen, jefe mafioso judío que estableció sus negocios en Los Angeles desde los años 30 hasta finales de los 60.

Turner y Stompanato eran las dos caras de la moneda, pero quiso el cruel destino que sus caminos se cruzaran hasta llegar a una conclusión que ocupa un puesto destacado dentro de lo que podríamos denominar la crónica negra de Hollywood.

Lana Turner había conocido a Johnny Stompanato en la primavera de 1957, poco después de separarse de su cuarto marido, el también actor Lex Barker (conocido por dar vida a Tarzán en unas cuantas películas).

Stompanato era un italoamericano, de nombre rimbombante, que había combatido en el teatro de operaciones del Pacífico durante la guerra y que, tras una estancia turbia en China, regresó a Estados Unidos afincándose en Los Angeles. Allí entró en contacto con la mafia local y pronto se convirtió en el guardaespaldas preferido de Mickey Cohen. En una fiesta de celebridades, organizada por Cohen, Stompanato encandiló a Turner con su encanto italiano y con su aspecto de galán de serie B.

Iniciaron una relación tormentosa marcada siempre por los enfrentamientos, los celos, y los malos tratos físicos. En otoño de 1957 se produjo una de las anécdotas que explica mejor cómo era "Johnny Stomp". Fue en el set de rodaje de la película Another Time, Another Place, que Turner protagonizaba junto a un joven Sean Connery. La película se filmaba en Inglaterra.

La cuestión es que Stompanato, dominado por los celos y creyendo que Turner estaba teniendo una aventura con Connery, irrumpió de forma violenta en el set amenazando con una pistola. Connery no se amedrentó y le propinó un fuerte puñetazo en la mandíbula apoderándose del arma. El ridículo que protagonizó el matón fue espectacular y pocos días después fue expulsado de Inglaterra.

Las situaciones conflictivas y de tensión continuaron pero Lana Turner no consiguió distanciarse de él. Todo se encaminaba hacia un final trágico que finalmente se produjo la noche del 4 de abril de 1958 en la mansión de la actriz en Beverly Hills. La pareja tuvo el enésimo de sus enfrentamientos. La hija adolescente de Lana, Cheryl Crane, temió por la seguridad de su madre y, según la versión oficial, apuñaló por la espalda a Stompanato utilizando un cuchillo de cocina.

La muerte de Stompanato en la casa de una gran estrella del celuloide provocó una conmoción mediática en Los Angeles. En la vista judicial posterior, la audiencia consideró que se había tratado de un homicidio justificado y absolvió a Cheryl. En la corte, Lana Turner prestó una emotiva declaración que muchos consideraron como la mejor interpretación de su carrera. Mickey Cohen corrió con los gastos de los abogados que representaron los intereses de la familia Stompanato y, al ser desestimada su demanda, se hizo cargo de las costas del juicio. La familia pretendía sacarle a Turner siete millones de dólares en concepto de indemnización pero el juez desestimó la causa.

Obviamente, se ha teorizado sobre lo que pudo ocurrir aquella noche desde el mismo momento en que se produjo el homicidio. Muchos creyeron que fue Lana Turner quien despachó a "Johnny Stomp". Según esta hipótesis, se le habría aconsejado a Turner que hiciera ver que su hija había sido la autora del apuñalamiento. Al ser menor, habría afrontado un castigo muy leve. La cuestión es que no se hallaron evidencias físicas que demostraran esta aseveración.

En LA Confidential, el personaje de Stompanato es bastante relevante en la trama. En la novela de James Ellroy se le llega a colocar como uno de los autores de "la Matanza del Búho", una orgía criminal que supone el punto de partida de la investigación que se desarrolla con posterioridad. En la película, a "Stomp" no se le llega a ver en esta situación aunque se le reserva una divertida escena en la que está tomando una copa con Lana Turner cuando es abordado por Ed Exley (Guy Pearce) y Jack Vincennes (Kevin Spacey).