17 de gener del 2008

John Williams, genio de la música



Voy a dedicar una serie de artículos a un hombre que es uno de mis ídolos y al cual considero un auténtico fenómeno en el campo de la música y, en especial, en la composición para el cine.

El maestro Williams nació en Floral Park (estado de Nueva York) en 1932. Se formó musicalmente en la prestigiosa Juilliard school de Nueva York. Al acabar su formación se traslada a Los Angeles a finales de la década de los 50 incorporándose al grupo de trabajo del gran compositor Henry Mancini que le introduce en el mundo de la música de cine. Colabora con él en las bandas sonoras de Peter Gunn (1959), Dias de Vino y Rosas (1962), y Charada (1963). También compagina ese trabajo con el de arreglista y director musical del cantante Frankie Laine.

Colabora con otros grandes maestros como Franz Waxman, Bernard Herrmann y Alfred Newman dentro de su trabajo como orquestrador en los grandes estudios. También toca el piano en diferentes bandas sonoras creadas por Jerry Goldsmith, Elmer Bernstein y, de nuevo, Henry Mancini.

Con todo este bagaje a sus espaldas empieza su propia carrera como creador musical a mediados de los 60 con multitud de trabajos. Recibe sus primeras nominaciones al Oscar en 1967 y 1969 ganándolo finalmente con la adaptación musical para la película El Violinista sobre el Tejado (1971). Su carrera se dispara y pasa a ser el compositor más solicitado en Hollywood. Hace todo tipo de partituras pero destacan de esta época sus composiciones para grandes producciones como La Aventura del Poseidón, El Coloso en Llamas, y Terremoto.

Es en esta época cuando un joven director llamado Steven Spielberg se pone en contacto con él para que escriba la música de su "opera prima", Loca Evasión (1974). Spielberg había quedado impresionado con la música de la película The Reivers (1969) y pensaba que Williams sería el compositor ideal para sus films. El tiempo le ha dado la razón puesto que se trata de una de las alianzas más largas y fructíferas de la historia del cine. A partir de ese momento John Williams escribiría la música para todas las películas de Spielberg (exceptuando El Color Púrpura) y sería el autor de melodías maravillosas que estan en la memoria de todo el mundo en films como Tiburón, Encuentros en la Tercera Fase, la saga Indiana Jones, E.T., El Imperio del Sol, Hook, Jurassic Park, La Lista de Schindler, Salvar al Soldado Ryan, Minority Report, La Terminal, Munich etc...

John Williams ha creado auténticos himnos y nadie como él ha conseguido que la música de cine se haya divulgado tanto entre todo tipo de públicos.

Era tal la buena harmonía de trabajo que existió, desde el primer minuto, entre Spielberg y Williams que el director de Cincinnati lo recomendó a su amigo George Lucas cuando éste buscaba compositor para una película con grandes incógnitas que ningún estudio quería producir. Se trataba de Star Wars.

Pero esta es otra historia...